SABER DE CIENCIAS

BIOLOGIA. APARATO URINARIO

El aparato urinario se compone de dos partes que son los órganos secretores y la vía excretora.
Los órganos secretores son los riñones, que producen la orina, y además desempeñan otras funciones importantes como la secreción de las hormonas eritropoyetina y  renina.

 

La vía excretora, que recoge la orina y la expulsa al exterior. Está formada por:

 

 

  • los uréteres
  • la vejiga urinaria
  • la uretra

El aparato urinario es uno de los sistemas que permite mantener la homeostasis del equilibrio ácido-base y del balance hidrosalino, extrayendo de la sangre productos de desechos del metabolismo celular y eliminándolos hacia el exterior. Los riñones son los órganos de filtración. Los uréteres llevan la orina, hacia la vejiga urinaria. Desde ésta, la orina es  expulsada, bajo control voluntario, a través de la uretra hacia el exterior, pasando por el meato urinario externo. Riñones, uréteres y vejiga urinaria son semejantes en el varón y la mujer, pero la uretra presenta diferencias en su trayecto y relaciones con los órganos del sistema reproductor y el periné según el sexo.

aparato urinario


Los riñones
Son órganos pares ubicados profundamente en la parte alta de la cavidad abdominal, a ambos lados de la columna vertebral y por debajo del diafragma. Estos órganos tienen a su cargo la ultrafiltración de la sangre para permitir la eliminación de todos los deshechos y recuperar del modo más eficiente los componentes esenciales. Intervienen en la regulación hídrica y electrolítica del medio interno y en la de su pH, en la excreción de los productos finales del catabolismo proteico y en la regulación de la tensión arterial.
Tienen 10 cm de longitud, 6 cm de ancho y 3 cm. de espesor aproximadamente, presentan un borde cóncavo que mira hacia la aorta y que presenta el hilio renal, es decir el lugar por donde penetra la arteria renal, rama directa de la aorta de muy corto recorrido y con una presión sanguínea muy próxima a la de la aorta. Por el hilio sale la vena renal, subsidiaria de la vena cava inferior. Sobre el polo superior de los riñones se encuentran las glándulas adrenales ó suprarrenales, que no forman parte de ellos.
El riñón está recubierto por una cápsula conjuntiva externa. Haciendo un corte longitudinal del mismo se observa, en la sustancia propia del riñón, dos zonas: la zona cortical y la zona medular ó central.
La corteza es granulosa, y la zona medular presenta unas formaciones piramidales estriadas, que son las pirámides de Malpighi, separadas una de otra por las columnas de Bertin, que parecen prolongaciones de la zona cortical. Las estrías de las pirámides, son haces de conductos colectores que desembocan en el vértice de las pirámides, volcando la orina a la pelvis renal, pasando luego al uréter correspondiente, que la lleva a la vejiga urinara, para ser eliminada finalmente a través de la uretra.

riñon


Cada riñón está formado por aproximadamente un millón de nefronas.
El nefrón o nefrona es la unidad estructural y funcional del riñón
Un nefrón está formado por las sig. partes:

  • el corpúsculo de Malpighi, que se compone del glomérulo y la cápsula de Bowman.
  • el túbulo renal
  • el túbulo colector ( que le dan el aspecto estriado a la zona medular del riñón )

El túbulo renal presenta zonas diferenciadas que son:

  • túbulo contorneado proximal
  • asa de Henle, con sus segmentos descendente y ascendente
  • túbulo contorneado distal

El glomérulo está formado por una red capilar arterial que deriva de la arteriola aferente (entra en el corpúsculo) y se resume luego en la arteriola eferente, por donde sale la sangre que pasa luego a otra red capilar situada alrededor del túbulo renal. Esta última red capilar termina en una vénula afluente de la vena renal.
El corpúsculo renal o de Malpighi contiene un vaso capilar ramificado, que forma un ovillo que recibe el nombre de glomérulo. El glomérulo recibe la sangre de un pequeño vaso llamado afrente, que le trae sangre arterial procedente de la arteria renal. La sangre sale del glomérulo por otro pequeño vaso llamado eferente. La sangre proveniente del vaso eferente, en su mayor parte irriga a los túbulos renales y va a dar después e la vena renal, perdido ya su oxígeno, pero eliminadas también las sustancias nocivas. Rodeando el glomérulo se halla la llamada cápsula de Bowman, que tiene dos capas que dejan entre sí un espacio, espacio que comunica con el comienzo del túbulo renal. En realidad, la cápsula de Bowman es la extremidad ensanchada del túbulo renal que hunde o invagina el glomérulo.
La cantidad de sangre que pasa por el riñón es de aproximadamente un litro por minuto, vale decir que más menos cada cinco minutos pasa toda la sangre por el riñón. Esa sangre proveniente de la arteria renal, tiene una presión del glomérulo de 75 mm de mercurio, la cual tiende a filtrar la sangre. Y aunque hay elementos que tratan de contrarrestar dicha filtración (presión osmótica de la sangre, presión del tejido renal y dentro del tubo renal), filtran los glomérulos más de 100 g de líquido por minuto. Ese líquido contiene todos los elementos solubles del plasma sanguíneo, salvo las proteínas. Eso daría una enorme cantidad de orina que si se eliminara así haría que el organismo perdiese junto con las sustancias que debe eliminar, otras que necesita. Para evitar esto, los túbulos renales reabsorben aproximadamente el 99% del agua que filtran los glomérulos y seleccionan las sustancias que esa agua contiene disueltas, reabsorbiendo por completo algunas como la glucosa, y dejando pasar parte de otras, como la sal. Otras no vuelven a pasar por la sangre, como la creatina. La reabsorción de parte de lo filtrado a través del glomérulo por los túbulos renales, es regulada por una secreción interna del lóbulo posterior de la hipófisis.

nefrona



Los uréteres
Los uréteres son dos conductos de unos 25 a 30 cm. de largo, bastante delgados, aunque de calibre irregular, que llevan la orina desde la pelvis renal a la vejiga, en cuya base desembocan formando los llamados meatos ureterales, cuya disposición en válvula permite a la orina pasar gota a gota del uréter a la vejiga, pero no viceversa. Su interior está revestido de un epitelio y su pared contiene músculo liso.

La vejiga
La vejiga es un depósito membranoso situado en la parte inferior del abdomen y superior de la pelvis, destinada a contener la orina que llega de los riñones a través de los uréteres. Cuando está vacía, sus paredes superior e inferior se ponen en contacto, tomando una forma ovoidea cuando está llena. Su capacidad es de unos 300 a 350 g, aunque puede variar de una persona a otra y en ciertas afecciones. Su interior está revestido de una mucosa con un epitelio poliestratificado pavimentoso, impermeable a la orina. Su pared contiene un músculo liso, que contrayéndose y con la ayuda de la contracción de los músculos abdominales, produce la evacuación de la vejiga a través de la uretra. A esto se llama micción. La parte de la vejiga que comunica con la uretra está provista de un músculo circular o esfínter, que impide normalmente la salida involuntaria de la orina. Además de estas fibras lisas hay otras estriadas que ayudan a retener voluntariamente la orina.

La uretra
La uretra es el conducto que permite la salida al exterior de la orina contenida en la vejiga. Difiere considerablemente en ambos sexos. En la mujer es un simple canal de 3 a 4 cm. de largo, algo más estrecho en ambas extremidades que en el resto de su trayecto. Es casi vertical y se halla por delante de la vagina, abriéndose en la vulva por delante del orificio vaginal.
En el hombre la uretra mide de 18 a 20 cm. de longitud, y es de calibre irregular, presentando partes ensanchadas y otras estrechadas. Además no es recta sino que presenta ciertos ángulos. Tiene muchos segmentos: uretra prostática (parte que pasa por la próstata), uretra membranosa y uretra esponjosa, es decir, la rodeada por el cuerpo esponjoso, la que a su vez puede subdividirse en varios segmentos.
Desde el punto de vista de sus enfermedades la uretra puede dividirse en dos segmentos: la uretra anterior y la uretra posterior, separados por un esfínter de músculo estriado, situado a unos 3,5 cm. de la vejiga.
Las hemorragias o secreciones que se producen en la primera, salen al exterior y las que se producen en la segunda, pueden volcarse en la vejiga. La inflamación de cada uno de estos sectores produce también síntomas distintos. En la uretra desembocan diversas glándulas en las que pueden acantonarse una infección de la uretra.

vejiga urinaria


Formación de la orina
La orina es una solución de urea, sales y otras sustancias de desecho, solubles en agua, producida en el riñón a partir de la sangre que transporta la arteria renal. La sangre pasa por cada uno de los glomérulos, quedando retenidos en el mismo las sustancias de mayor volumen, mientras las sustancias proteicas como el agua, las sales, la urea y otras pasan desde las paredes de los capilares a la cápsula de Bowman. Por lo tanto, el glomérulo realiza la función de filtrar, mientras que la cápsula y los túbulos recogerán la orina formada y la transportan a las vías urinarias para su posterior eliminación.

Filtración de la orina
La filtración es un proceso que permite el paso de líquido desde el glomérulo hacia la cápsula de Bowman por la diferencia de presión sanguínea que hay entre ambas zonas.
El líquido que ingresa al glomérulo tiene una composición química similar al plasma, solo que no tiene proteínas, o éstas se encuentran en porcentajes más bajos.
A través del índice de filtrado glomerular, es posible inferir que cada 24 horas se filtran, en ambos riñones, 180 litros aproximadamente.
Los factores que influyen en la filtración glomerular son: flujo sanguíneo y efecto de las arteriolas aferente y eferente.

Eliminación de la orina
Una vez formada la orina en los glomérulos, discurre por los túbulos hasta llegar a la pelvis renal, desde donde pasa al uréter y llega a la vejiga, lugar donde es almacenada. Cuando el volumen supera los 250-500 cm3, sentimos la necesidad de orinar, debido a las contracciones y relajaciones del esfínter, que despierta el reflejo de la micción.
La necesidad de orinar puede reprimirse voluntariamente durante cierto tiempo. La frecuencia de las micciones varía de un individuo a otro debido a que en ella intervienen factores personales como son el hábito, el estado síquico de alegría o tensión, y el consumo en mayor o menor medida de bebidas alcohólicas.
La cantidad de orina emitida en 24 horas en el hombre es de aproximadamente 1500 cm3. El aumento por encima de esta cifra se denomina poliuria y la disminución oliguria.